Predoma en El Manejo Integral del Caballo

"Los Caballos saben hacerlo,
es nuestra responsabilidad aprender a pedirlo".



Dentro del esquema de mansedumbre que promueve el Manejo Integral del Caballo,
la llamada Predoma, hace referencia a los manejos correspondientes pasado el período de Impronta y previo a la Doma en sí misma.


Es decir que abarca varias categorías de potros; desde potrillos de quince días, destetes, sobreaños y potros de varios años.


La metodología es la misma, y los resultados similares sin importar la edad del potro, e independiente de que el mismo recibiera el manejo de impronta o no, al nacer.


Promueve la obtención de una mansedumbre total de cada potro exceptuando solo dos aspectos; afectar su boca y montarlo, lo cual se reservará para el proceso de Doma.


Es la perfecta antesala de la Doma, ya que le entrega al domador los potros tan mansos, que éste puede dedicar todo el tiempo que insume la misma al lomo y la rienda.

 
El proceso de Predoma inicia con el trabajo del potro suelto en el picadero,  que equivale al inicio del vínculo con el joven caballo.



Módulo 1
 
Características Instintivas del Caballo,
(ver Fundamento Teórico):

http://todoeqqus.blogspot.com.uy/p/blog-page_55.html
 
1er Contacto
Este ejercicio podría llamarse El Contacto, o Generando El Vínculo, etc.


Es una técnica que induce al potro, usando el lenguaje que el puede decodificar,  a interesarse en tomar contacto con la persona que lo está trabajando dentro del corral estando el potro completamente suelto.

La técnica de 1er Contacto, es una herramienta invaluable en la Comunicación con El Caballo.


Su uso es de primer orden en el trabajo con potros, ayudando también a reforzar el vínculo en caballos ya domados, e incluso corregir caballos que presentan problemas de comportamiento.

 
Si bien se desarrolla en el corral redondo donde por diferentes razones la comunicación es más fluída, es posible realizarla en exteriores, donde el caballo se encuentre e incluso estando éste suelto con su manada.

 
Dependiendo de cada animal, en general alcanza con practicarla unas pocas veces para notar que la integra y responde a ella.


Es excelente para corregir a los caballos que no se dejan atrapar ni embozalar.


Y también para corregir vicios (morder, moverse, pechar, etc).


Aplicar esta técnica a los caballos de manada, nos permitirá habituarlos a recorrer el campo tocando y revisando uno a uno sin necesidad de trasladarlos ni encerrarlos.

 
Es la manera más eficaz de acceder a que el caballo deje de vernos como un peligro inminente y comience a considerar la posibilidad de vincularse con nosotros.

Los habitúa a dar el frente y permanecer en la espera de que nos acerquemos a ellos.






Durante el proceso de doma, aunque el potro la conozca ya, 
es bueno practicarla como inicio de sesión,  habilitando así  el desgaste del excedente de energía,  y continuando la sesión de doma  con el potro “enfocado”.


Lo anterior vale también para cualquier caballo estabulado, como rutina anterior a cualquier entrenamiento que le corresponda.


Cuando un potro conoce la técnica es factible que ingresemos al corral y el nos busque dando el frente.


Eso no impide que lo enviemos a dar unas vueltas y unos giros para pedirle enseguida que pare.


De esta forma le estaremos reforzando el estar atento y coordinado para que desista de intentar  adivinar  y anticiparse.

La técnica es una, pero han surgido variables y adaptaciones.
Básicamente consiste en soltar al caballo en el corral de trabajo, y utilizando el lenguaje corporal que él comprende; lo alentamos a alejarse de nosotros.
Al hacerlo, el potro tiene la posibilidad de gestionar su miedo y evaluar nuestras intenciones.
Mientras se desplaza por el corral, nosotros observamos el lenguaje corporal del caballo, e iremos interpretando como adaptar el nuestro para establecer un "diálogo" gestual y energético que vaya invitando al potro a unirse con nosotros.

El tiempo que el potro demore en llegar a este punto es individual y puede variar desde unos minutos a más de una sesión en diferentes días. 

Pasos a seguir en la técnica de Primer Contacto;


1/ LLegar con el potro al centro del corral, situarme adecuadamente, soltarlo y alentarlo a alejarse de mí.


2/ Lenguaje corporal del manejador; 
mirar el potro a los ojos, hombros rectos, brazos arriba.
mensaje; apartatede mí - analiza tus opciones.
Indicar cambios de dirección.
Hacer que se mueva y cambie de dirección no implica asustarlo.

3/ Buscar en el lenguaje corporal del caballo los gestos que indican que la comunicación está fluyendo:
oreja del costado que vemos apuntando a nosotros,

reducción del círculo (se acerca a nosotros, alejándose de la empalizada),

mascar o lamerse los labios,

bajar la cabeza y el cuello (disposición a considerar un acuerdo).

4/Al ver estos signos suavizo mi lenguaje corporal fijando la vista en las ancas, colocando mis hombros de costado al caballo, retrayendo los brazos hacia mi cuerpo, 
solicito los giros alejándome del caballo.

Todo ese cambio de lenguaje, sumado a la disminución de la velocidad, llevará al potro a girar más suavemente evaluando detenerse.

5/Permaneciendo atentos a ese instante, cuando ocurra, detendremos todo movimiento dando incluso un paso atrás (o al costado dependiendo como estemos situados), para reforzar el premio.
Doy un descanso, procurando mantenerme de costado al potro y sin mirarlo a los ojos.
Evalúo que descanse manteniendo su posición.
Si comienza a caminar el juego se reinicia.

6/Luego aplico las técnicas de semicírculo alrededor de él o la de avance y retroceso de frente a él, hasta que me permita tocarlo.
Cuido mantener mi mirada lejos de sus ojos, y mi lenguaje corporal amistoso y relajado, además de chequear mi energía.
Mi estado interno esta muy ligado a mi respiración.

El potro integra por asociación de ideas y hábito.
Una vez que asocie que parar y dar el frente son la solución al "conflicto", intentará repetirlo cada vez más rápido.

Es de esperar que asocie el lugar del corral donde lo logró, e  intente parar ahí.
Es un error frecuente en manejadores principiantes, que se lo permitan hacer.

De esta manera, será él que estará definiendo donde y cuando parar y por lo tanto él será quien nos esté entrenando a nosotros.

Otros conceptos básicos de importancia son:

Simetría
Los caballos parecen no cruzar demasiada información entre hemisferios.
Es importante cuidar la simetría de todos los manejos a que los sometamos.
Cada caballo guarda más reserva o muestra relativa dificultad en un lado más que en el otro.
Y las personas tendemos a trabajar con esmero su lado izquierdo descuidando el lado derecho.

Finalizar la sesión
El momento de finalizar cualquier sesión de trabajo con un  caballo, es cualquiera en el que el animal esté realizando adecuadamente algo (aún cuando no hayamos alcanzado nuestro objetivo del día).
A esto se llama terminar "con buena nota", y promoverá la buena disposición del joven potro frente a futuros encuentros.

Castigo
El concepto de "castigo" en doma natural corresponde a continuar trabajando (gastando energía).

Premio
El concepto de "premio" es la suspensión momentánea o total de la exigencia y el movimiento (descanso=conservación de energía),
el descanso que demos como premio debe ser proporcional al trabajo exigido.

Instinto
Si el caballo tiene por mandato instintivo conservar su energía,
como lograr que se coordine y desee "trabajar" con nosotros?:

Los caballos cuidan su energía disponible para poder huír ante un inminente ataque, sin embargo, si éste nunca ocurre, el estado físico del caballo se vería comprometido.
Cual es la solución que les ofrece la madre naturaleza?; 
EL JUEGO.
Juegan en mayor y menor medida a lo largo de toda su vida.
Si logramos que nuestro entrenamiento de cualquier etapa se vuelva un juego, entonces empezaremos a notar su disfrute al coordinarse.


Tiempo de calidad
El llamado "tiempo de calidad" con el caballo es una poderosa herramienta para generar y fortalecer el vínculo, corresponde 
al tiempo dedicado a reconfortar al potro ya sea permaneciendo en el corral con él sin exigirle nada, sea cepillándolo, verdeándolo un rato, etc.

Frecuencia
El caballo integra conceptos a través de asociación de ideas simples y repetición (hábito),
avanzan más trabajando 3 o 4 días seguidos, que en períodos de trabajo intercalado.

Límites
El Manejo Natural o Integral del Caballo, busca tener presentes todos los aspectos de la rica naturaleza equina.

Un aspecto que suele confundir a los amantes del buen trato y el bienestar animal es el de establecer y hacer respetar los LIMITES SALUDABLES.
Sin límites claros no hay respeto, sin respeto no puede generarse la confianza.
Sin respeto y sin confianza, el caballo deja de ser un buen compañero de aventuras para volverse una compañía inestable y en ocasiones peligrosa.

La manada es implacable en este aspecto.
Aleccionar a un potro irrespetuoso es responsabilidad también de las yeguas líderes.
Un individuo que no ofrece y / o sabe como exigir respeto es un individuo no respetado y por tanto nunca será lider.
Y nótese la palabra EXIGIR.
Aquí la naturaleza equina avala plenamente el uso del dominio, llegando incluso a expulsar momentáneamente del grupo a un miembro que no puede responder a dicha demanda de respeto.

Etica
El caballo como vimos es esclavo de sus instintos.
Por tal motivo coordinarse no es una opción, es un mandato.
Por lo anterior, la línea entre seducirlo a colaborar y abusarlo es sutil y queda en manos de la ética y el sentido común de cada manejador.

Teniendo presente lo anterior, nos será más fácil comenzar a aceptar que TODO lo que el potro parece no entender o hacer mal , es SIEMPRE nuestra responsabilidad.

Cuando la paciencia escasea, es saludable retirarnos del corral, respirar, distraernos y conectar con ese concepto para descubrir que estamos haciendo para confundirlo.

Módulo 2

Desensibilización / Sensibilización
(planilla adjunta)

Estos son dos bloques opuestos y complementarios.
Opuestos conceptualmente, complementarios en cuanto a que la correcta aplicación de ambos nos dará como resultado un caballo física y emocionalmente confiado y confiable.

Desensibilización 

Forja la autoconfianza en sí mismo y la confianza en el ser humano.

Es el conjunto de manejos al que sometemos al potro hasta lograr que deje de mostrar reacción alguna frente a los estímulos que le presentamos.

Esto amplia su rango de autocontrol a la hora de recurrir a sus mecanismos de defensa, al desarrollar confianza en ellos mismos así como en nosotros.

Para desensibilizar aplicamos un estímulo y lo mantenemos hasta lograr indiferencia hacia éste,  de parte del potro.
Es decir que suspendemos el estímulo solo cuando el potro ya no presente reacciones. 
Hay zonas que por instinto los potros defienden más, las zonas donde eran atacados por los depredadores.
No es necesario desatar una lucha cuando intentamos desensibilizar una de esas partes.
Lo adecuado será pasar por esos lugares difíciles o de mucha reacción,  seguir por una zona que se acepte mejor, y volver a la 
parte más comprometida las veces que sea necesario.

Estos trabajos habituarán al potro a confiar su cuerpo y sus reacciones, ya que  nuestra presencia será asociada a su seguridad.

Sensibilización

En relación directa al liderazgo.

Este bloque de trabajo corresponde a grabar en el potro, ciertos códigos físicos que se vuelven la clave a la que recurrimos ante cada desafío físico en su futuro de caballo montado.

Provee además, las herramientas con las que guiaremos al caballo entorno a nuestro espacio personal para compartirlo con él de manera físicamente segura para nosotros.

El principio fundamental de este bloque de trabajo es 
CEDER A LA PRESION, que es lo contrario a lo que el caballo hace instintivamente.

Sensibilizar es aplicar un estímulo y ante la mínima respuesta en la dirección buscada, suspender inmediatamente todo estímulo.

Cuanto más rápido conectemos la acción correcta del potro, con la supresión del estímulo, más sutil y "liviano" se volverá nuestro caballo.

Consideraciones Importantes 
 
Cuidar la simetría.

Reflexionar a que categoría pertenece un manejo, antes de aplicarlo para no generar el efecto contrario al que estamos buscando.

RECORDATORIOS
Es una buena práctica dar a oler primero los elementos de trabajo
antes de  iniciar cada nuevo manejo.
Los  manejos no están numerados porque el orden depende un poco del manejador y de si
se están realizando por primera vez o si son parte de una práctica.
Permitir a los potros investigar por su cuenta motiva su curiosidad.
Cuidar la simetría.
BLOQUE  DESENSIBILIZACION
CONTINUO con el estímulo hasta que no haya reacción.
DAR EL FRENTE	La Unión. Con los potros muy pequeños se realiza de manera menos dramática.
	Por ejemplo; entrando con la madre al corral e impidiendóle llegar a ella, pero sin
	asustarlo, solo bloqueando su paso.
BOZAL	Se refiere a la primera embozalada, donde se dará primero a conocer el cabresto y
CABRESTO	el bozal, acariciando con ellos el cuerpo y cabeza para que sienta textura, ruidos
	de hebillas, etc.
TACTO	Refiere al conocido término de descosquillado.
	El potro debe permitir el contacto en todo su cuerpo.
	Para iniciar es más seguro usar algún elemento para llegar a rascarlo sin
	arriesgarnos a sus reacciones en especial en la zona de los posteriores.
MANTA	Manta o jerga o trapo; trabaja dos aspectos; el contacto y el movimiento.
	Primero se la paso por todo su cuerpo, cuando lo acepta, inicio un trabajo de
	pegar con suavidad en todo su cuerpo empezando por el cuello, el lomo, para
	chequear después las zonas más comprometidas.
	Hacerlo rítmicamente, y cada tanto suspender y rascar con la misma manta.
	Si se muestra calmado, imitar el movimiento de la jerga en el lomo al ensillar, y
	desensillar, e igual con una manta que debe salir por su cabeza.
NAILON	El nailon trabaja tres aspectos; sonido, movimiento y tacto. Es de las cosas que
TOLDO	más temen los caballos en general.
	Oler, tocar, recorrer su cuerpo. Cuando lo acepte trabajar con una bolsita en el
	extremo de una caña corta para introducir más movimiento.
	Colgar un toldo en el lugarde trabajo para dejarlo flamear también es viable.
LOMO	Si el potro es pequeño es fácil; alcanza con apoyarnos con nuestro antebrazo
PRESION	sobre su lomo, o abrazarlo por encima de éste y presionar hacia el piso.
	En el potro grande lo dejaremos para cuando esté bien descosquillado en todos
	los otros sentidos y entonces lo arrimaremos a la empalizada subiéndonos
	nosotros a la misma y utilizando una pierna para la maniora como veremos
	en el práctico.
PEINE CRIN	En la higiene del caballo y su estética en exposiciones o desfiles, es necesario
COLA	poder lavar desenredar, etc sus cerdas. Muchas veces resienten el
	trabajo por desconocer los tirones que implican, aunque no es doloroso se
	asustan. Los machos en especial, se desafian mordiéndose el cuello y por esto
	reaccionan al cerdeado de crines (según raza y edad).
CINCHA	Refiere a apretar y aflojar la zona de la cincha con un elemento como el cabresto
	y recorrer haciendo esto su vientre de manera intermitente.
SACKING OUT	El término no tendría traducción pero sería algo exclamativo; "sácalo afuera, o
PALMA	sácalo todo"!!!.
	Es EXCELENTE en potros y caballos extrañadores, miedosos, nerviosos
	de cualquier edad y doma.
	Sería como provocar la  reacción ante el ruido, el contacto firme  y el movimiento
	rítmico, para asociarlos con un resultado inofensivo y tranquilizante.
	Todo lo que no lastime puede servir; un flotador de piscina, un pilot, una bolsa de
	ración, etc.
	Cuando lo acepte, palmeo por todo el cuerpo al caballo con la mano
	(la  palmada es antinatural para el caballo y por eso muchas veces se sorprende).
FRIENDLY  o	Consiste en balancear una cuerda con un suave movimiento de muñeca,
AMISTOSO	dejándola caer rítmicamente sobre el cuerpo del caballo.
	El movimiento debe recordar la cola de otro caballo, y su accionar será envolvente
	alrededor del cuello, lomo, ancas, patas, manos cuello y con mucha práctica
	también la cabeza.
	Cuando la cuerda "sale " del caballo pega en el suelo alrededor de éste.
CEPILLO	Manejo imprescindible, resienten un poco la rasqueta hasta que encuentran que es
RASQUETA	disfrutable (cuidar los apoyos en el caballo).
VIBRACIÓN	Habituación a las máquinas de esquilar y de tuzar.
AGUA	Habituación a permitir ser mojados y bañados (de especial importancia a la hora de
	curar y de domar ).
BLOQUE  SENSIBILIZACION
SUSPENDO el estímulo ante la mínima respuesta en la dirección buscada.
La presión aplicada de manera intermitente y elevando la intensidad progresivamente si se necesita,
(de menor a mayor).
PORCUPINE o	Habitúa a ceder a la presión (instintivamente empujan cuando sienten presión).
PUERCOESPÍN	Aplicar en las espaldas (base de los giros montado).
	Aplicar en los posteriores (idem).
	Aplicar en la nuca (base de cabrestear y bajar la cabeza).
	Aplicar en el pecho (base de retroceder y frenar montado).
FLEXION de	Habituar a "traer" la cabeza hacia un costado con la menor presión posible en el
CUELLO	costado de la hociquera.  Deberá ir buscando responder a la presión realizada con la
	punta de los dedos.
	Iniciará con un desplazamiento mínimo.
	Cuando llegue a doma deberá llegar a su costillar y poder mantenerse así.
GIRO	Se refiere a cabrestear hacia el costado cediendo la nuca y en lo posible cruzando las
ANTERIORES	manos.
	Sitúa al caballo físicamente para responder a la rienda cuando se le pida cambiar de
	dirección.
GIRO	Sitúa al caballo físicamente para  responder a la pierna del domador cuando éste
POSTERIORES	intente girar el caballo sobre sí mismo.
	Conecta en la mente del caballo el ceder la cabeza a un costado con desplazar sus
	posteriores hacia el lado contrario.
RETROCESO	Inicia con el porcupine en el pecho, continúa asociando la presión del cabresto
	sobre la hociquera del bozal. Si es necesario tocando con un palito las cañas.
MIEMBROS	Levantarlos, limpiarlos, golpearlos simulando al herrador.
CASCOS	Si se realizó un buen trabajo de desensibilización, ahora resta enseñar a cambiar el
	peso de la pata o mano y levantarla. Primero con la ayuda de una cuerda y luego
	acariciando primero y levantando con nuestra mano.
	Primero es solo levantar y bajar.
	Más adelante mantener en el aire, y por último limar y golpear.
CEDER LA BOCA	Mi dedo entre los labios en la comisura o final posterior de la boca.
	Busco la lengua y en cuanto abre la boca retiro todo estímulo.
	Fundamental para enfrenar y dosificar con antiparasitarios.
CABRESTEAR	Siempre inicio alejándome un poco para darle espacio ya sea para avanzar o para
	evadirse.
	Solicito con tirones intermitentes y hacia un costado del caballo para desequilibrarlo
	y así favorecer el movimiento.
	Caricia y descanso. Lenguaje corporal adecuado (no espero la respuesta de frente a
	él sino ofreciéndole mi costado para invitarlo).
	En este sistema el caballo cabrestea por confianza, es necesario ser paciente y
	consistente.
	Para ayudarlo a probar cosas puedo ofrecerle verde para animarlo a caminar, e
	incluso probar que alguien lo anime de atrás a distancia prudencial.
	Sin embargo es inevitable el momento en que tocará tironear ya que pondrá a prueba
	su instinto de ir contra la presión.
ATAR	SOLO cuando esté cabresteando con normalidad, sino entrará en pánico, ya que la
	inmovilidad forzada despierta el instinto de huída.
	Si es en un árbol, que sea en uno de tronco ancho, sin alambrados cerca.
	Una pared es mejor, de tipo empalizada, que la separación de tablas no permita meter
	ningún casco.
	Lo mejor en primera instancia es ayudarse con una cámara de moto o auto , usar una
	cuerda larga (8m aprox), pasarla por la cámara, acercar al caballo y permanecer cerca
	con el resto de la cuerda.
	Cuando intente "sentarse", dejarlo ir unos cuantos pasos y luego traerlo a la misma
	posición.
	Después de varios intentos, cuando se calme, lo atamos con un nudo de soltar.
	Si se sienta podemos motivarlo de atrás con una rama para ayudarlo a descubrir que
	el alivio es ir hacia delante.
	Es aconsejable mantenerse a distancia de un caballo atado, en especial cuando está
	aprendiendo.
AUTOCONTROL	Lo van logrando en general, cuando ya realizan fluídamente todo lo demás.
	Se chequea tocándolo suelto en el campo.
	Y se chequea realizando todos los manejos que vimos antes con el potro estando atado.
	Al llegar a este punto tendremos un potro de confianza, capaz de medir sus reacciones
	y considerar alternativas a explotar o huír.
	Si alcanzamos este punto, la doma no presentará mayor dificultad ni para él ni su
	domador, pasando por ésta como por cualquier otra etapa, sin que se vivencie con estrés.
PLANILLA GUIA
MANEJO  DE  MANSEDUMBRE / PREDOMA Nº                          SEXO F NAC                     IMPRINTING NOMBRE MADRE PADRE DIAS MANEJO D DAR EL FRENTE E BOZAL/CABRESTO S TACTO E FRIENDLY N SACKING OUT /palma S CINCHA I MANTA B NAILON/toldo I SONIDO /tijera/spray L PEINE/crin/cola I LOMO PRESION Z CEPILLO/RASQUETA A VIBRACION AGUA S PORCUPINE E FLEXION CUELLO N GIRO ANTERIORES S GIRO POSTERIORES I RETROCESO B MIEMBROS/CASCOS I CEDER BOCA L CEDER NUCA I CABRESTEAR Z ATAR A AUTOCONTROL DAR CUERDA D FILETE O MANDIL M RIENDAS LARGAS A MANEADOR

El esquema anterior se ofrece como una guía de posibles manejos que implican ejercicios de desensibilización y de 
sensibilización.  
Los tiempos de cada bloque o módulo de trabajo los determina quien amansa, pero siempre viendo al potro como individuo y respetando los tiempos de éste.




A modo de referencia podríamos decir que de 5 a 7días consecutivos por bloque nos permitiría alcanzar un grado aceptable para iniciar la doma. 

Estos módulos será apropiado separarlos por uno o dos días de 
descanso.

Ejemplo;

Bloque 1 ; Primer Contacto; 5 a 7 días.
Descanso; 1 o 2 días.
Bloque 2; Desensibilización; 5 a 7 días.
Descanso; 1 o 2 días.
Bloque 3; Sensibilización; 5 a 7 días.
Descanso; 1 o 2 días.

Vale decir que los conceptos no son limitados a su bloque,
es decir que se realizó esa planilla a modo referencial para crear una base física y mental en el potro previo a su doma.

Sin embargo, durante la misma, se recurrirá esporádicamente 
al ejercicio de 1er Contacto, asi como al concepto de desensibilizar (ej; a la montura) y sensibilizar (ej; a la pierna).


El puente que une la predoma con la doma es la
Sensibilización en movimiento.
  
Decimos que es el puente porque puede formar parte del  fin de la predoma, o el inicio de la doma.

Una vez que el caballo ha integrado el cabrestear, lo guiaremos a caminar, detenerse y retroceder mediante gestos, prescindiendo del contacto físico.

Cuando integre adecuadamente la gestualidad, podremos agregar sonidos, lo que será de mucha ayuda cuando montemos 
las primeras veces.

Cuando efectúe con fluidez lo anterior, podremos con exigencias
mayores como acercarse y alejarse con nosotros permaneciendo
quietos:
juego del yo-yo,
dar cuerda,
juego de conducción.

La sensibilización en movimiento es la auténtica guardiana del 
Liderazgo.

Recordemos que:
Liderar es un tema de jerarquías y confianza.
Las jerarquías y los acuerdos que las preservan se establecen
con dominio.
Dominio para hacer respetar los espacios.
Establecer dominio (para fundamentar una alianza) implica dirigir el movimiento y la velocidad del otro.
Los  límites definidos (de los espacios de cada uno), implica respeto.
Quien no es dúctil en el juego de dar y exigir respeto nunca será
confiable.

La ecuación es 
Respeto (por el espacio),
Confianza (mutua),
Liderazgo (líder y seguidor).

Dominio; las implicancias del término.
Cuando elegimos profundizar en la doma natural, acordamos que el término natural hacía referencia a tener presente las necesidades del caballo y para ésto nos determinamos a ver el mundo a través de sus ojos.

El dominio en el universo ecuestre no se refiere al dominio que los depredadores conceptualmente conocemos.

Dominio en los caballos no se refiere a someter, ni a restringir la libertad de otro,
se refiere a dirigir la negociación de defender o establecer acuerdos.
Recordemos que el interesante sistema de jerarquías se sustenta en la interconectada red de acuerdos que establecen el lugar que cada individuo ocupa en su manada.

Es el sustento de la paz que reina en una manada, evitando conflictos y lesiones innecesarios, y manteniendo a sus integrantes unidos y coordinados.

No obstante, durante el ejercicio de dominio la intensidad de la demanda se va incrementando de manera gradual, hasta llegar al último recurso; el de contacto físico.

Es decir primero es gestual, luego desplazamientos amenazantes y violentos, y en última instancia la agresión física.

Muchos conflictos se resuelven antes de llegar a la agresión física.
Es la decisión, la intensidad y la certeza en la energía de un individuo determinado a llevar hasta donde sea necesario el reclamo del espacio, 
lo que hace que el otro individuo involucrado en el conflicto, decida retirarse.

En esta nueva etapa que llamaremos sensibilización en movimiento, 
alentaremos al potro a ceder ya no solo su cuerpo, sino su espacio en respuesta a nuestra demanda.

Los potros, muchas veces sorprendidos de éste cambio en nuestra actitud que hasta ahora promovía el contacto cercano y el acercamiento pacífico, pueden responder de manera exagerada y en ocasiones agresiva.

Es muy importante tener bien presente nuestros recursos y habilidades para preservar nuestra integridad física a la vez que continuamos con toda certeza, con toda energía y dispuestos (como lo estaría otro caballo de jerarquía mayor) a llegar al impacto físico si resulta absolutamente necesario, en pos de reclamar el espacio (que es exigir respeto).

Si lo hacemos con miedo, o duda, eso transmitiremos.
Sino lo hacemos por lástima u otras razones (miedo a perder la confianza ganada),
estaremos cediéndole el liderazgo al potro, y reafirmándole que no somos confiables.

Un ejemplo;

Un potro amansado con un buen trabajo de desensibilización, es el que se describe como "me deja hacerle cualquier cosa".
Su dueño cree que no es necesario dedicar tiempo a sensibilizarlo porque al fin y al cabo, logra todo lo que desea del potro; para que trabajar más.
Además, eso de dominar no le gusta porque el potro actúa como "ofendido", "se aleja de mí", ya "no me quiere"
...(todas proyecciones).

Pero como es mansito lo monta igual.
Resulta que ese potro no siente respeto ni confianza por quien lo monta ya que nunca le fue ofrecido ese entrenamiento (y además los humanos siempre le cedieron el espacio),
por tanto a la primer señal de peligro, no confiará su vida más que a él mismo resolviendo lo que se le presente según su instinto; huyendo (con su dueño arriba lo que se conoce como "disparar"), o luchando ( bellaqueando con su dueño arriba).

Este es el inicio de todos los cuentos de detractores de los sistemas de doma etológicos, naturales o racionales.
Falla metodológica o falla humana?.

Acompañar al potro en el imprescindible camino de aceptar el liderazgo humano es responsabilidad del domador.
Este es responsable frente a sí mismo, sus pares y el potro.

Quien sienta  que tal tarea lo desborda, puede muy bien disfrutar de los caballos mansos que otro haya entrenado, pero debería evitar formar jóvenes caballos.

El dominio no implica el castigo del caballo.
El dominio implica corrección en tiempo y forma.
Contamos con 3 segundos para que el potro asocie un acto inadecuado con su corrección, de ahí la necesidad de estar decidido a actuar.

Es útil recordar (para alejar culpas y proyecciones):

un caballo tiene un umbral del dolor muy alto, (son capaces de incorporarse y pastar con una fractura expuesta),

un potro de pocos días  es reprendido por su madre y otras yeguas con mordidas muy severas que no dejan consecuencias,

durante toda su vida juegan recurriendo a manotazos, patadas y mordidas en diferentes zonas del cuerpo,

es más; se invitan a jugar saltando al lado y tirándole las dos patas al "invitado",

por este último motivo es muy importante exigir respeto, sino moldearemos una pequeña bomba de tiempo  de 500 kg de puro instinto que desconoce el NO.

No se trata de pegar, no es eso lo que sufren, ya que pueden llegar a "desensibilizarse" al dolor.

Se trata de impactar (si es necesario físicamente), pero con toda certeza, enfoque, energía provocando la sorpresa, que es lo que más temen ya que despierta su momentáneo miedo a lo desconocido.

Hasta ahora trabajamos dándole confianza y asegurando un ambiente protegido casi de laboratorio.

Es hora de desafiarlo y acompañarlo en sus reacciones sin perder nuestra calma, dispuestos a guiar y corregir.

Esta es la manera de reforzar la confianza y caminar en pos de un vínculo sólido, versátil  y de mutuo disfrute.



Dar cuerda

En su momento hablamos que dar cuerda es un ejercicio que desequilibra al caballo en su movimiento y por tal motivo su uso se remite solo a un ejercicio de calentamiento y/o gasto del excedente de energía.

Para que lo integramos a la doma?

Para no detener el progreso de aquellas personas que no se sienten listas para el trabajo con el potro suelto.
Es decir, la cuerda nos da ese elemento “tangible” de comunicación entre el potro y mi persona.

Y es útil como práctica de la siguiente premisa;
“aunque el escenario cambie tu y yo permaneceremos coordinados”, sin importar las distracciones del entorno.

Es decir, que podemos habituar al potro a dar cuerda en diferentes lugares, con diferentes desafíos y no limitarnos al corral.
Es un ejercicio que si se conduce bien, resulta en una buena práctica para reforzar el liderazgo.

Para iniciar en la cuerda cualquier caballo es importante haberlo conducido por la desensibilización y la sensibilización antes de intentarlo.


La razón es simple:
Cada vez que pedía al potro que cediera el espacio,  y el respondia “sí” a ese pedido yo le daba el premio de dejarlo descansar.

Al dar cuerda yo pido al potro que ceda el espacio, el cede, y yo  sigo reclamando manteniéndolo en un movimiento continuo.

Esto lo asocia con 2 posibles situaciones de manada:

1/ que el padrillo lo esté corriendo (hay que salir lo más rápido posible),
2/que otro potro lo invite a jugar (a lo que responderá pateando a su compañero).

No queremos que asocie el ejercicio con ninguna de esas situaciones.
Si creyera estar en la 1/ el ejercicio se volvería una huída, sería contraproducente y peligroso para él y para mí, además de provocar tensión.
Si creyera estar en la 2/ yo correría el riesgo de recibir una buena patada como parte del juego.

Si el potro fue previamente guiado con los manejos de desensibilización y sensibilización podrá sorprenderse un poco con el manejo de dar cuerda, pero no pateará ni saldrá huyendo sino que se basará en la confianza que nos tiene para descubrir la “solución” a la nueva propuesta.

Dar cuerda debe ser un juego como todo lo demás o habremos pronto perdido el interés de nuestro entusiasta compañero.

Al inicio procuraremos 3 o 4 vueltas y una parada que usaremos para reconfortar y animar al potro efusivamente dejándolo a la vez descansar.

En potros muy enérgicos con tendencia a elevar dicha energía insistiremos en dar cuerda al paso y a un trote parejo y tranquilo, manteniéndolos en círculos muy pequeños y ampliándolos a medida que se calmen.

Con potros muy quedados impulsaremos efusivamente para que logren un trote de trabajo enérgico y constante.

El paso, el trote y muy especialmente la parada deben dominarse a la perfección antes de permitir un galope.

El ejercicio a la cuerda puede excluir perfectamente el galope.
El galope a la cuerda es el aire que más lesiones puede provocar sino se realiza de manera calmada, ya que el círculo es demasiado pequeño y fuerza tendones y ligamentos.

Cuando el potro responda fluidamente a todo lo indicado podremos incluir cambios de dirección sin necesidad de pararlo primero.

Pero si pedimos esto antes de que esté pronto tendremos un potro precipitado e inseguro con reacciones exageradas e indeseables fruto de la confusión.

Durante el período de habituación a dar cuerda, es bueno intercalar algunas caminatas sin pedir nada.

Recordemos que el “trabajo” no debe ser percibido como un castigo, sino como un juego;
el juego de mantenerse atento a descubrir la siguiente indicación.

Estar atento a la siguiente indicación nunca significa anticiparse.

Un potro debe ser distraído de usar su voluntad tanto para precipitarse como para anticiparse, siempre.


MOVIMIENTO COORDINADO ;
                 la base de una "mente lúdica".

Aprendimos que exigir y mantener el movimiento es una forma sustituta de "castigo" en doma natural, ya que va en contra del principio de conservación de energía.

Como podemos entonces motivar al potro o al caballo para que desee interactuar con nosotros de buena voluntad?..

Varios aspectos envuelven esta respuesta;

apelar al instinto de coordinación (el más poderoso),

volverlo un juego,

y  calibrar mi energía.

En nuestro lenguaje hablado distinguimos muy bien un enunciado imperativo de una invitación amable.

Pues el lenguaje de lo corporal y en especial, el lenguaje intuitivo o de la emoción permite aún mucho más sutileza que la palabra hablada.

Es decir que para echar lejos un caballo puedo ser todo lo descortés que desee, 
pero para compartir la intimidad de desdibujar los límites de mi espacio y el de un caballo, deberé aprender a pedir "por favor" sin palabras.

La gentileza, la cortesía, la amabilidad, la humildad de reconocer que no tengo derecho sobre nada ni nadie, 
y alimentar un intenso deseo de jugar, de conocer, de descubrir,
son sensaciones imperceptibles a sentidos inexpertos, 
pero fuertemente audibles en la percepción de un caballo...

y sino:
observa a un niño conectar con un caballo que no conoce y sin ninguna preparación previa;
seguro el animal le presta mucho más interés que a nosotros.




Si construimos en el orden adecuado y le dimos a cada etapa la repetición adecuada para generar el hábito que permite la integración,
habremos llegado como sin querer a la coordinación en movimiento.

Nos decidiremos cualquier día a prescindir de cuerdas, bozales y fustas y nos permitiremos chequear el grado de concentración o coordinación que tenemos con nuestro potro.

Podremos enviarlo a ejercitarse, cambiar su dirección, influir en su velocidad, detenerlo, invitarlo a seguirnos y mantenerlo caminando junto a nosotros completamente suelto, deteniéndose cuando lo hagamos, retrocediendo cuando lo hagamos, cediendo sus espaldas a nuestra indicación y al igual con su grupa.

No hay sistema de doma que exija hacerlo, pero es seguro que si contamos con un potro o caballo en esta disposición mental, estaremos contando con un individuo abierto y entregado a todo lo que nos propongamos integrar a futuro.

Un compañero involucrado y no un colaborador obligado.
Y claro que podemos obviar esta prueba, que descartamos para el potro es posible…

y para nosotros?:
..que tanto confiamos en ese vínculo?,
..que tanta confianza depositamos en bozales y cabrestos?,
..que parte de la comunicación se la cedimos a una simple fusta?,

Surge duda, incertidumbre, desconfianza?..
como responde el potro a todo eso?.

No hay mejor manera de calibrar nuestra intuición, nuestra energía y paciencia que trabajar con un potro suelto.
(Cuidado con el ego!; puede que no le guste lo que vea).

Desensibilizar se trató de ruido, brusquedad, impertinencia,
 (nuestro depredador a gusto).
Fue una buena herramienta para quitar "la interferencia", generar confianza y 
cerrar el encuentro con un "te acepto", de parte del potro.

Sensibilizar y Coordinarse en movimiento, se trata de silencio, intimidad, comunión, confort, complicidad, sutileza.
Es trasmutar el te acepto en  un "te elijo".

 "Acepto compartir mi espacio contigo", 
versus "Elijo compartirme en movimiento contigo".

Es el inicio del vínculo,
de la complicidad,
de la confianza más allá de corrales y cuerdas,
es la verdadera SINCRONICIDAD .

Acaso no es lo que todos anhelamos?,
vivenciar el contacto con un caballo que olvida todo lo que lo motiva “afuera”,  
y muestra su deseo de seguirme y permanecer conmigo?...

...si,  pero si continuamos  centrados en nuestra esencia cazadora y dominante, 
la sutileza de aquello que solo puede ofrecerse por voluntad propia, 
aquello que nunca podrá ser tomado por la fuerza, 
florecerá sutilmente y se marchitará frente a nuestros ciegos ojos depredadores.


Por eso decimos que los caballos nos invitan a integrarnos,
(sentir, pensar, hacer en coherencia),
mientras  no lo logremos,
obedecerán nuestras demandas como siempre lo hicieron, 
pero resguardarán su esencia bien a salvo de nuestra incoherencia.

La predoma llega a su fin.
Pueden existir manejos que no pertenezcan a categoría alguna que pueden integrarse a este proceso de predomar (ej subir al trailer).

Y pueden existir otros que por lo específicos no se incluyan en ninguna categoría sino que se dejan a criterio del propietario de un caballo (ej hacer soguero).

Todo manejo que no afecte el lomo ni la boca de un potro puede ser incluído en el proceso de predoma.



DESENSIBILIZAR nos dio acceso a su cuerpo y su espacio,

SENSIBILIZAR nos dio acceso a su mente y su movimiento,

Acceder a CONECTAR con su ESENCIA, será un balance entre lo amable y divertidos que seamos como compañeros, y lo acertivos y confiables que seamos como líderes.


MAGIA...no es cosa de un instante,

                        MAGIA...es hacer que eso parezca.